Gran esposa real

Lo utilizó por primera vez, durante el segundo período intermedio, la reina Nubemhet, esposa de Sobekemsaf I;[1]​ pero fue Meretseger, la esposa de Sesostris III, la primera reina consorte que escribió el título (wrt) junto con su nombre en un cartucho.

En algunos casos, se adornaba con una imagen de la diosa Nejbet, cuyo animal emblema era el buitre.

Las princesas reales desempeñaban también una función primordial en la religión, ya que la Gran Esposa Real oficiaba los ritos como sacerdotisa de distintos templos, en un pueblo donde la religión estaba inexorablemente entrelazada con las funciones de los gobernantes.

Si el caso fuera el primero, un príncipe varón no habría tenido problemas de legitimar su ascensión al trono, al tener pleno derecho por ser heredero del faraón e hijo de la Gran Esposa Real.

Si la Gran Esposa Real concebía una hija, dicha princesa tenía escasas posibilidades de llegar a ser reina-faraón.

Su destino más probable era ser desposada con un hijo del rey –a veces nacido de la relación con una esposa de menor rango– o con un pretendiente al trono a quien ningún vínculo sanguíneo uniera con la casa reinante.

El mejor ejemplo que brinda la historia de reina-faraón es Hatshepsut, quien siendo hija favorita del rey Tutmosis I y su gran esposa real encontró impedimentos para suceder a su padre, razón por la cual fue desposada con un príncipe real, hijo de una esposa secundaria del rey, el futuro faraón Tutmosis II.

[8]​ Durante el período de Amarna, el faraón Akenatón elevó a la Gran Esposa Real, Nefertiti, a una posición muy cercana a la suya propia, de modo que podría considerarse como corregente con él, dándole un papel mucho más prominente en los rituales religiosos que cualquier otra Gran Esposa Real haya tenido antes o después de ella.

Aunque Ramsés II no concedió a la Gran Esposa Real Nefertari ninguna facultad extraordinaria, sí le dio un gran protagonismo, colocando estatuas de ella del mismo tamaño que las suyas y construyéndole su propio templo en Abu Simbel, un acto sin precedentes en la historia del Antiguo Egipto.

Escultura en madera con incrustaciones de piedra y metal de Tiy , Gran Esposa Real de Amenofis III y madre de Akenatón . Nótese la corona de la diosa Hathor con los cuernos como marco junto con el disco solar y las dos grandes plumas de avestruz, identificatorio de su rol como Gran Esposa Real. Dinastía XVIII . Imperio Nuevo .
Nefertari , la Gran Esposa Real del rey Ramsés II , adornada con corona de plumas de avestruz y disco solar. Obsérvese los cartuchos que rodean su nombre. Dinastía XIX . Imperio Nuevo .
Estatua de Hatshepsut.
Ahmose-Nefertari , que instauró una larga dinastía de grandes esposas reales en la dinastía XVIII .