Se denomina Gráficos existenciales (en inglés: existential graphs) al sistema lógico y de notación creado por el lógico y filósofo norteamericano Charles Sanders Peirce.
Peirce dirigió así sus esfuerzos a encontrar un sistema de notación en el que los signos empleados acarreen literalmente su significado con ellos mismos: Como ya lo había adelantado en su teoría de signos, pretendía elaborar un sistema iconográfico de símbolos tales que estos "se parezcan" a los objetos y relaciones mentados por los mismos.
Debido al creciente interés en la lógica gráfica, renació un cierto interés por los gráficos existenciales [8] y surgieron tentativas tendientes a reemplazar las reglas de inferencia de Pierce por otras más intuitivas.
A partir de 1903 Peirce desarrolló un sistema asimismo inconcluso que denominó "gráficos existenciales coloreados" (en inglés: Tinctured Existential Graphs).
El objetivo del mismo era de subsumir los subsistemas anteriores incrementando su potencia semántica y maleabilidad.
El presenta artículo trata a continuación de los gráficos alfa y beta, que son las partes más completas y que fueron históricamente objeto mayores análisis.
La conjunción lógica de varias proposiciones (atómicas o no), se representa escribiendo simplemente sus símbolos uno a continuación del otro: para afirmar que dos proposiciones P y Q son verdaderas, se escribe simplemente "PQ".
No existe ninguna exigencia en cuanto a la forma de tal trazado, pero por costumbre se utiliza un círculo o un óvalo.
Peirce denomina dicho símbolo cut que puede traducirse como corte o recorte.
Es fácil advertir que la negación del conjunto ¬(P ∧ ¬Q) es en la lógica proposicional en un todo equivalente a P→Q.
Las expresiones atómicas de los gráficos Beta no son proposiciones tales que "llueve" o "Peirce murió pobre", sino predicados o letras que los representan (habitualmente F, G, H...).