Sus funciones gubernativas se vieron interrumpidas en varias ocasiones por tener que trasladarse a la Ciudad de México a tratar asuntos relacionados con la administración presidencial.
Como Secretario de Educación, tuvo un papel principal en la fundación del Instituto Politécnico Nacional.
Con Vázquez Vela como secretario de educación y el normalista Gabriel Lucio como subsecretario, el presidente Cárdenas deseaba que el programa veracruzano fuese aplicado en todo el país.
Los resultados no pudieron ser más grandiosos, de 1935 a 1940 se duplicó el número de escuelas rurales, con lo que junto al impresionante reparto agrario promovido por el cardenismo, se otorgó a los campesinos un elemento imprescindible para su redención social.
En esta labor participaron también tanto en el aspecto administrativo como editorial figuras de talento como Adolfo López Mateos, Germán List Arzubide, Raymundo Mancisidor, Guadalupe Cejudo, Adela Palacios y Raúl Contreras Ferto entre mucho otros.