Gonzalo Fernández de Burgos

[1]​ En 912, confirmó la Carta Puebla de Brañosera llamando abuelos a los otorgantes originales, Munio Núñez de Brañosera y Argilo.

Esta localidad va a ser el punto de partida de la familia Lara, que pocos años después va a conseguir la creación del condado hereditario de Castilla con su hijo Fernán González.

Su iniciador, Gonzalo Fernández, tuvo primero que hacer frente a la guarnición musulmana de Carazo.

En 912 participó en la expansión castellana hasta el río Duero repoblando Haza, Clunia y San Esteban de Gormaz.

Fray Justo Pérez de Urbel supone que después marcharía a la corte navarra donde entre los años 924 y 930 aparece un Gundisalvus comes, nombre poco frecuente en los documentos navarros.