Gnosticismo moderno

En el siglo XIX se publicaron estudios populares que hicieron uso de textos recientemente redescubiertos.Durante muchos siglos, la única información disponible sobre estos movimientos fueron las críticas de los que escribían contra esas ideas, y las pocas citas conservadas en dichos trabajos.En 1851, M. G. Schwartze publicó el texto original en latín y su traducción al inglés realizado por la Comisión del Codex Askew.En el siglo XIX empezaron a publicarse estudios populares que hacían uso de materiales originales recientemente redescubiertos.[2]​ Diversos ocultistas occidentales retomaron la terminología gnóstica en mayor o menor medida, incluyendo a Helena Blavatsky (1831-1891), quien cofundó la Sociedad Teosófica.[2]​ En 1890, Mead publicó en varios artículos en la revista Lucifer la primera traducción al inglés del texto Pistis Sophia.Entre 1896 y 1898, Mead publicó otra serie de artículos en el mismo periódico, «Among the gnostics of the first two centuries», que sentó las bases para su monumental compendio Fragments of a faith forgotten (‘fragmentos de una fe olvidada’) en 1900.Cuando dejó la Sociedad Teosófica en 1909, había publicado muchas influyentes traducciones, comentarios y estudios de textos gnósticos antiguos.El clero era tanto masculino como femenino, teniendo varones obispos y mujeres «sofías» (Pearson, 2007, pág.En 1897 Taxil realizó una conferencia de prensa donde confesó el fraude y agradeció al papa León XIII (a quien también había embaucado)[cita requerida] por su apoyo económico.Algunos movimientos espirituales, místicos y esotéricos que retomaron total o parcialmente los postulados de los antiguos gnósticos.Existen varios grupos modernos que dicen representar las ideas de un cierto «cristianismo gnóstico original».Esto aumentó considerablemente la cantidad de textos originales disponibles y dio lugar a una amplia difusión.