Giulio Campagnola (Padua, 1482–Venecia, 1515) fue un pintor y grabador italiano, conocido hoy día sobre todo por sus grabados.
Hijo de Girolamo Campagnola, se formó en Mantua con Andrea Mantegna.
Hacia 1499 se instaló en Ferrara, donde pasó unos años, hasta que en 1509 fijó su residencia en Venecia.
En sus obras plasmó el estilo de la escuela veneciana, patente en el efecto tonal de sus obras, una especie de puntillismo que se vislumbra en obras como Mujer desnuda tumbada en un paisaje, Concierto, Natividad, El astrólogo, Joven pastor, Cristo y la samaritana, Flautista jovencito y Gamo cautivo.
[1] Fue padre adoptivo del pintor y grabador Domenico Campagnola, que era aprendiz en su taller.