Girolamo Ghinucci

Girolamo Ghinucci (Siena, 1480 - Roma, 3 de julio[1]​ de 1541), fue un eclesiástico y diplomático italiano.

[2]​ Fue clérigo y después auditor de la Cámara Apostólica y secretario del papa Julio II.

Nombrado obispo de Ascoli Pisceno en 1512, participó en los preparativos y en la celebración del Concilio de Letrán V. León X le envió como nuncio a Inglaterra en 1518; durante su estancia en este reino ofició como consejero del rey Enrique VIII y como su embajador en España.

Paulo III le creó cardenal en el consistorio de 1535; recibió el título de Santa Balbina , que en 1537 cambió por el de San Clemente.

Administrador de Cavaillon desde ese mismo año y de Tropea desde el año siguiente, fue también Camarlengo del Colegio Cardenalicio, ofició como legado junto a los cardenales Alessandro Cesarini y Giovanni Domenico de Cupis para restablecer la paz entre Carlos I de España y Francisco I de Francia, y tuvo una participación destacada en la constitución de la Compañía de Jesús, oponiéndose a la misma junto con el cardenal Bartolomeo Guidiccioni.