Geografía de Cataluña

El actual estado geológico de Cataluña puede comenzar a describirse desde los primeros grandes cambios del Paleozoico.

Inicialmente el territorio formaba parte de una cuenca oceánica en la que, por reposo orogénico, se depositaban materiales sedimentarios finos y arcillosos.

Hoy en día este material se encuentra en la mitad sur de las cordilleras litorales y en el Prepirineo.

Mientras, hacia el interior de la cuenca se acumulan arenas y arcillas que darán lugar al gres.

Al cerrarse el macizo del Ebro, en forma de golfo, se originó un gran lago salado.

[2]​ Las precipitaciones medianas anuales oscilan entre los 350 litros del Segriá y los 1200 de la alta Garrocha.

[3]​ La humedad relativa mediana anual se encuentra en general en todo el territorio entre el 70 y el 75 %.

En el litoral esta cifra es fuerza homogénea a lo largo de todos los meses del año, en el interior se presenta un mínimo en verano y un máximo en invierno, especialmente acusado este en los lugares donde acostumbra a haber niebla.

La variación de las temperaturas a lo largo del año es más grande que en la costa.

En invierno las mínimas están en la Plana de Vich, causadas por una inversión térmica acusada que más moderadamente afecta a todo el territorio mencionado.

No llega con mucha intensidad la lluvia en otoño a las tierras de poniente.

Allí las lluvias son regulares durante todo el año y las temperaturas medias del verano están por debajo de los 20 °C.

Las cuencas restantes, siguiendo el llamado eje Mediterráneo, nacen tanto en la Cordillera Litoral, Prelitoral como en la Llanura del Ampurdán y riegan sus aguas por 6890 km².

Los ríos más importantes son (de norte a sur) el Daró, Tordera, Besós, Foix, Gayá, Francolí y Cenia.

La mayoría se encuentran en el Pirineo catalán en forma de pequeñas lagunas (estanys), originados por antiguos circos glaciares.

Desde los Pirineos hasta Blanes aparece la Costa Brava, caracterizada por acantilados de pequeña altura y calas escondidas.

Luego sigue la larga línea de playas del Maresme en paralelo a la cordillera litoral.

Hacia el sur, la costa es de nuevo suave y se caracteriza por una menor ocupación humana.

Respecto a la vid, las viñas se extendían ese año por 769 km², principalmente en el Panadés.

La protección del entorno natural catalán ha crecido rápidamente durante los últimos años.

Sin embargo, era ya desde 1932 que se pretendía proteger algunos espacios del Pirineo en el llamado Plan Macià.

[11]​ Hasta después de la restauración democrática y el gobierno autonómico no se volvió a legislar para proteger espacios naturales.

Además de esos parques, existe una red más extensa de espacios específicos protegidos mediante leyes menos específicas[12]​ cuyo objetivo es aunar la diversidad del territorio catalán y su flora y fauna local.

[13]​ El relieve de Cataluña presenta, a grandes rasgos, tres grandes unidades morfoestructurales generales: los Pirineos, la formación montañosa que conecta la península ibérica con el territorio continental europeo y queda situado al norte de Cataluña; otra unidad formada por una alternancia de elevaciones y llanuras en paralelo a la costa mediterránea, llamado Sistema Mediterráneo Catalán o Cordilleras Costero Catalanas y una última unidad estructural situada entre las anteriores llamada depresión central que configura el sector oriental del Valle del Ebro.

Tradicionalmente se ha diferenciado el Pirineo Axial, el principal, del Prepirineo (meridional en el territorio catalán) y que son unas formaciones montañosas paralelas a las sierras principales aunque de menor altitud, menos escarpadas, y de una formación geológica diferente.

Ambas unidades son más anchas en el sector occidental que en el oriental, y es ahí donde presentan sus mayores cumbres.

A grandes rasgos, se suele categorizar el territorio en tres unidades morfoestructurales generales: una unidad montañosa formada por los Pirineos, otra unidad formada por alternancia entre llanos y subunidades montañosas llamada Sistema Mediterráneo Catalán y una tercera unidad situada en el interior que constituye un espacio más llano, llamada depresión central catalana.

Es una cordillera alpina, que sigue un eje de oeste a este y separa la península ibérica del territorio continental europeo.

Hacia el oeste se encuentran los puntos más altos y mayor grosor norte-sur, mientras que hacia el este van perdiendo altura hasta alcanzar el Mediterráneo, en el que penetra como una extensión de la cordillera mediante el cabo de Creus.

Las llanuras más destacadas son la Depresión Litoral, que se extiende por el Maresme, Barcelonés (Llano de Barcelona) y Bajo Llobregat (Delta del Llobregat) y la depresión prelitoral (Vallés, Panadés).

Imagen de satélite de Cataluña (original NASA).
Principales unidades geológicas del territorio catalán.
Pirineos en el Ripollés .
Lago Gento en el Pirineo , donde en 1956 hubo la temperatura más baja grabada, hasta ahora, en la península ibérica .
Mediterráneo Litoral Mediterráneo Prelitoral Mediterráneo Continental Mediterráneo Prepirenaico Mediterráneo Pirenaico Mediterráneo Oceánico
El río Ebro a su paso por Miravet .
Ciudad de Sitges y sus playas.
Mapa de Cataluña por usos de suelo en 2002.
Cultivos Aguas continentales Arenales, nieves y otros suelos improductivos Núcleos urbanos, industriales y vías Bosques, claros y vegetación húmeda
Bosque del Parque natural del Montseny en periodo otoñal.
Perfil característico de Montserrat .
Los Encantados , dos picos emblemáticos de los Pirineos y el estanque San Mauricio.
Unidades morfoestructurales de Cataluña:
Pirineo Prepirineo Depresión central catalana Pequeñas estribaciones en la depresión central Cordillera transversal Cordillera prelitoral Cordillera litoral Depresiones litoral y prelitoral y otras llanuras costeras
Sierra de Montsant , una muestra del relieve accidentado en Cataluña.