Garcilaso de la Vega (embajador)

En 1471 recibe una merced del rey Enrique IV de Castilla.

Le sucedió en el cargo su hermano Lorenzo Suárez de Figueroa, que tendría la embajada entre 1499 y 1502.

Garcilaso reunía en su persona la audacia para hablar con franqueza al pontífice, con una cuidada formación en protocolo, una aguda sensibilidad literaria-musical, y unas dotes diplomáticas alabadas por el mismo Luis XII de Francia, que lo consideraba “embajador de los Reyes, y Rey de los embajadores”.

Miembro del Consejo Real desde 1502, presidió las Cortes de Toro a la muerte de la reina, y en 1506 fue nombrado ayo y camarero mayor del entonces infante don Fernando.

Al apoyar en la disputa por la gobernación de Castilla a Felipe el hermoso, Fernando el Católico le retiró su favor.