Su esposa se movilizó ante su amigo Máximo Gorki, para que hiciera presión ante Lenin para que Gabriel fuera liberado.
Siendo liberado, permanecieron un tiempo en San Petersburgo y luego se exiliaron en París.
Durante su exilio, el príncipe Gabriel apoyo al gran duque Cirilo Románov en sus derechos al trono imperial.
En agradecimiento, este último dio a su esposa, Antonia Nestoróvskaya el título de "princesa Románovskaya-Strélninskaya", Gabriel se vio atribuir el título de "gran duque de Rusia".
Puedes contribuir aportando información sobre títulos y tratamientos de esta persona.