FLAC

Debido a ello, los archivos resultantes son reproducibles y útiles, además de ser más pequeños que si se hubiera aplicado directamente al archivo PCM un algoritmo de compresión estadística (como ZIP).

Los algoritmos con pérdida pueden comprimir a más de 1/10 del tamaño inicial, a costa de descartar información; FLAC, en su lugar, usa la predicción lineal para convertir las muestras en series de pequeños números no correlativos (conocido como "residuos"), que se almacenan eficientemente usando la codificación Golomb-Rice.

El más común es CAV, pero el CLV permite una mayor linealidad en el registro; aunque requiere el concurso de servos para controlar la velocidad angular del rotor, según se acorta el radio de la pista.

Además es usado en el intercambio de canciones por la red, como alternativa al MP3, cuando se desea obtener una mayor reducción del tamaño que en un archivo WAV-PCM, y no perder calidad de sonido.

Los archivos comprimidos son siempre perfectos, representación de los datos originales con poca pérdida.

Los archivos FLAC suelen tener esta misma extensión (*.FLAC), aunque no es raro encontrarlos como *.FLA; son perfectamente reproducibles con gran cantidad reproductores, especialmente de gama media y alta; incluso en computadoras antiguas, ya que una de las características del proyecto es que los archivos se descodifiquen en modo sencillo.

Otra característica es que, como todos los formatos sin pérdida, la relación de compresión final depende mucho del estilo musical, la variedad sonora (la presencia de ruido, típica de instrumentos como la guitarra eléctrica o la batería) añade información «extra» al espectro sonoro en casi todas las frecuencias-.

Para música más «limpia», espectralmente hablando, como la mayoría de la música para instrumentos acústicos y/o voz, se obtienen relaciones de aproximadamente 1/2,2; en otros estilos, como el dance o el rock, con un espectro sonoro generalmente más poblado, los archivos pueden quedar en desde 2/3 hasta 4/5 del tamaño original en formato PCM.