En aquella época, a los norteños les resultaba difícil creer que un gran orador hubiera sido esclavo.
Era muy extraño que un esclavo supiera leer y mucho menos escribir por lo que su autobiografía fue de gran importancia para darle voz a los esclavos y de esta manera dar a conocer como es la vida en esclavitud para así acabar con esta.
Cuando todavía era un niño fue separado de su madre, Harriet Bailey, la cual murió cuando él contaba con unos siete años.
La identidad de su padre es incierta; el escritor sostuvo que su padre era un hombre blanco, en primer lugar quizá su amo (el capitán Aaron Anthony), pero luego afirmó que no tenía ni idea de quién hubiera podido ser.
[1] Cuando Anthony murió, Douglass fue entregado a la señora Lucretia, esposa del capitán Thomas Auld; luego, cuando tenía ya unos doce años, pasó al servicio del hermano de este, Hugh Auld, que vivía en Baltimore, por lo que se trasladó allí.
En 1830 la mujer de su nuevo amo, Sophia, quebrantó la ley al enseñar a Douglass los rudimentos del alfabeto, pero cuando Hugh, el marido de Sophia se enteró e impidió que las clases continuaran.
Su nuevo amo lo azotó regularmente y, a los 16 años, casi hundido psicológicamente, logró en un enfrentamiento con Covey que este dejara de castigarlo violentamente.
Tras cruzar el río Susquehanna desde Havre de Grace en una pequeña balsa, Douglass continuó por ferrocarril hasta Wilmington, Delaware.
Una vez allí, se subió a un vapor que se dirigía a "Quaker City", Filadelfia, Pensilvania, para terminar al fin su camino en Nueva York en poco menos de veinticuatro horas de trayecto.
Años después declarará sobre este discurso: Nada ni nadie me produjo un sentimiento tal de odio a la esclavitud como lo hizo William Lloyd Garrison.
Sus piernas le temblaban, pero se sobrepuso e hizo un discurso memorable sobre su vida como esclavo.
La separación de Texas en 1861 era inminente; cualquier incidente que desequilibrara la balanza entre estados esclavistas y abolicionistas podía provocar la guerra civil.
Douglass se reunió con el presidente Abraham Lincoln en 1863 para establecer qué trato se daría a los soldados unionistas negros en la Guerra de Secesión, así como con Andrew Johnson por la cuestión de su derecho al voto; los abolicionistas blancos Lloyd y Wendell Phillips lo acompañaron en estas gestiones.
Douglass viajó a las islas británicas y dio varias conferencias, principalmente en iglesias protestantes, permaneciendo allí dos años, durante los cuales declaró haber sido tratado "no como un negro, sino como un hombre".
[6] En 1892, el Gobierno haitiano nombró a Douglass comisionado para la Exposición Colombina Mundial de Chicago.
Hacia 1877 Frederick Douglass compró su último hogar en Washington a orillas del río Anacostia, que bautizó como Cedar Hill (o Cedarhill), casa que amplió de 14 a 21 habitaciones y cuyas tierras aledañas también extendió un año después comprando 15 acres más de tierra (sesenta y un mil metros cuadrados); su casa es actualmente sede del Museo Histórico Nacional de Frederick Douglass, y conserva entre otros objetos un curioso armario de porcelana.
La nueva pareja viajó por Irlanda, Inglaterra, Francia, Italia, Egipto y Grecia de 1886 a 1887.
Sus estimaciones dieron en señalar que había nacido en febrero de 1816; los historiadores le dieron la razón en cuanto al mes al descubrir un documento, pero resultó haber nacido dos años más tarde de lo que creía, en 1818.
Pero poco después de haber llegado a su casa, falleció por un súbito ataque cardíaco o un derrame.
El trabajo literario más famoso de Douglass fue The Narrative of the Life of Frederick Douglass, an American Slave, publicado en 1845; no faltaron quienes creyeron que esta obra era una falsificación, negándose a creer que su cuidado estilo pudiese haber sido elaborado por un negro; el caso es que fue un inmediato éxito nacional e internacional y recibió abrumadoras críticas positivas; a los tres años de su publicación ya había sido reimpreso nueve veces y había 11 000 copias circulando solo en los Estados Unidos.
Douglass interviene como personaje en ucronías o novelas históricas alternativas, la historia estadounidense que nunca llegó a existir.
Asimismo, aparece brevemente en la serie de televisión Norte y Sur, interpretado por Robert Guillaume.