Con el nombre de fraticelli se nombra a varias sectas de herejes de la Edad Media que aparecieron en los siglos XIV y XV[1] que deben su origen a los franciscanos espirituales que se rebelaron contra las disposiciones y declaraciones del papa Juan XXII referentes a la pobreza franciscana.
La diferenciación entre los últimos espirituales, los fraticelli y otros grupos de herejes es difícil, pues se relacionaron, aunque organizativamente no estuvieran conectados entre ellos, con los apostólicos, los miguelistas,[2] los begardos, las beguinas, los dulcinistas, los joaquinitas y los fratres de opinione.
[3] Los fraticelli llevaron sus ideas hasta el extremo, especialmente las referentes a la pobreza, la absoluta intangibilidad de la Regla de la primera orden franciscana, siguiendo además las ideas joaquinistas.
[1][4] Estos grupos de herejes proclamaban el fin del verdadero pontificado (papado) romano, al considerar a Juan XXII y sus sucesores como herejes.
[1][4] Se difundieron especialmente en Italia, de donde pasaron, perseguidos por la Inquisición, a España y Grecia.