Nacido en Dijon, trabajó con su padre hasta los 16 años, pero recibió formación como dibujante por parte de François Devosges,[1] donde aprendió que un contorno fuerte y simple era un ingrediente valiosísimo en las artes plásticas[2] En 1809 marchó a París desde la escuela de arte de Dijon, y se convirtió en alumno de Pierre Cartellier, obteniendo el Grand Prix de Rome en 1812.
Después de la segunda restauración de los Borbones se retiró a Bruselas, donde, probablemente debido a la intervención del exiliado Jacques-Louis David[3] obtuvo algunos encargos del arquitecto Charles Vander Straeten, quien lo empleó para ejecutar nueve bajorrelieves en el palacio de Tervuren, hoy destruido.
En Bruselas, Rude se casó con Sophie Fremiet, hija de un compatriota bonapartista hacia quien tenía una serie de obligaciones, pero que con alegría le otorgó la posibilidad de regresar a París, donde llamó la atención en 1827 gracias a una estatua de la Virgen para St Gervais y un Mercurio atándose las sandalias (hoy en el Museo del Louvre).
Un discípulo importante de Rude fue Jean-Baptiste Carpeaux, quien posteriormente ejecutó su propia versión del Niño pescador napolitano, un tema popular en aquella época).
También se encuentran entre sus alumnos Charles Cordier y su hijastro Paul Cabet que fue también escultor.