Francisco de Solís y Folch de Cardona

Nació en Madrid en 1713, en la iglesia de San Francisco el Grande, donde su madre había acudido cuando se presentó el parto.

En su juventud perdió el ojo izquierdo mientras practicaba esgrima con el futuro rey Carlos III, lo que hizo que todos sus retratos muestren únicamente su perfil derecho.

[2]​ Estudió en la Universidad de Salamanca, al terminar sus estudios ejerció diversos cargos en la corte.

En 1755 fue nombrado arzobispo de Sevilla, en 1756 el papa Benedicto XIV lo nombró cardenal, participando en 1769 en el cónclave de elección del Papa Clemente XIII, en Roma.

[4]​ Los historiadores destacan tanto su esplendidez con los más pobres como su derroche en gastos de carácter suntuario.