[1] En 1514, embarcó rumbo a Las Indias, llegando a Santo Domingo en la isla La Española, después se trasladó a la isla Fernandina (Cuba) y participó en 1518 en la expedición de Juan de Grijalva; como era rico, puso uno de los navíos y muchos bastimentos, por lo que era socio y capitán.
Cinco soldados bajo su cargo resultaron heridos, pero logró avanzar hasta alcanzar tierras veracruzanas, desde donde regresó a Cuba en la embarcación al mando de Pedro de Alvarado.
Dadas las circunstancias adversas, se negó, junto con el capitán Alonso de Ávila, a dejar soldados para que comenzaran a establecer posiciones en los territorios recién descubiertos.
Sus acciones se vieron interrumpidas debido a que la Primera Audiencia, lo releva del cargo de Alcalde Mayor.
Debido a la inestabilidad que existía en Tabasco y Yucatán producto de lo pugnaz de los naturales de la región, Montejo viaja a España para solicitar ayuda logrando que la reina Juana I le expida una Real Cédula que le otorgaba la Gobernación de Yucatán, Cozumel y Tabasco, región comprendida desde el río Cupilco en Tabasco hasta el Ulúa en Hibueras (Honduras).
Montejo logró con dificultad pacificar parcialmente Tabasco después de muchos esfuerzos y sufriendo graves penalidades hasta 1537.
Una vez lograda la pacificación parcial, centró sus esfuerzos en la conquista de Yucatán.
Fueron necesarias tres campañas y 20 años para conquistar la península de Yucatán.