Debió este cargo a la voluntad del fallecido gobernador, Pedro Osores de Ulloa, su cuñado.
Su gobierno no se caracterizó por ningún hecho o iniciativa relevante.
También se empeñó en levantar algunas fortificaciones en Concepción, alarmado por noticias que hablaban del envío a Chile de una expedición holandesa.
Álava Nureña quiso ser confirmado en su cargo por el rey, pero este desoyó las súplicas que hacía en sus cartas.
Diego Barros Arana, historiador: Documento citado por José Toribio Medina: