Francisco Xavier de Oliveira
En 1746, tras su tercer matrimonio con Frances Hamon, inglesa de origen hugonote, abjuró del catolicismo y se convirtió al protestantismo.[4] Sus últimos 39 años vivirá en Inglaterra, donde continuará escribiendo, sin gran éxito, aunque viviendo sin agobios, gracias a protectores favorables, varias obras apreciadas por la belleza y gracia de lengua (Memorias, notas sobre escritores portugueses, libros de viajes,...), siendo hábil en la pintura de costumbres, imitando la manera de Joseph Addison en The Spectator.[2] En 1761, cuando ya llevaba muchos años fuera de su país de origen, la Inquisición le abrió un proceso, por el cual fue quemado en efigie,[5] como consecuencia de ciertas obras que escribió tras el terremoto de Lisboa de 1755, entre ellas Reflexions sur le desordre de Lisbonne et sur les autres phénomènes qui ont acompagné ou suivi cet desastre,[6] traducida por él mismo al portugués, y Discours pathétique au sujet des calamités présentes arrivées en Portugal.Adressé à mes compatriotes et en particulier a Sa Majesté Très-Fidèle Joseph I, Roi de Portugal.Hombre de agitada vida sentimental, contrajo matrimonio en tres ocasiones.