En diferentes ocasiones sirvió al virrey con el cargo de vicario general en Valdemone (Sicilia).En 1625, estando Sicilia sometida a una fuerte presión por los musulmanes, repelió dos distintos intentos de desembarco.En 1637, cuando desembarcó un contingente llegado desde Bizerta (ciudad portuaria de Túnez) para saquear la fértil vega de Palermo, Francesco III presentó batalla al enemigo y repelió el ataque, tomando cautivos a los que lograron sobrevivir.En ese mismo año, el conde-marqués fue elegido presidente del parlamento de Palermo.[8] Previamente, el 14 de marzo, testó ante el notario Pietro Graffeo.