Francesca de Rímini o da Polenta (Ravena, ca.
1259 – Gradara, Pesaro, 1285) fue una noble italiana de la Edad Media cuyo trágico destino fue inmortalizado por su contemporáneo Dante Alighieri en La Divina Comedia colocándola junto a su amante, en el segundo círculo del Infierno, destinado a los pecadores por lujuria; pero a su vez los intenta justificar y los ejemplifica como símbolos del amor.
Contrajo matrimonio en 1275 con Gianciotto Malatesta de Rímini porque, por razones políticas, esta unión era importante para su padre.
Gustavo Adolfo Bécquer, por su parte, también hace alusión a la historia de Francesca y Paolo en su Rima XXIX, aunque sin mencionarlos directamente.
En escultura, El Beso de Auguste Rodin se inspira en la misma fuente.