Fotografía de guerra en Latinoamérica
Las fotografías producidas serían utilizadas para contrarrestar la aversión general del pueblo Británico a una guerra impopular, y para compensar los relatos antibélicos de The Times.Dominar el complejo sistema de tomas [fotográficas] con el colodión húmedo no era tarea fácil y su experiencia anterior le ayudó a perfeccionar su método.Por lo tanto había que trasladarse al terreno con los productos químicos necesarios para su preparación.Es un daguerrotipo anónimo en el cual se ve al General John Ellis Wool entrando con las tropas norteamericanas en la localidad de Saltillo (México), en la guerra que hubo entre ambos países en esa época, conocida como la Batalla de Buena Vista.Pero de estos hechos aún no se han encontrado pruebas gráficas.Se conservan seis de éstas imágenes, copiadas en Albúmina, en el Museo Mitre.La propuesta de la casa Bate & Cía, no tuvo la dimensión y el despliegue que los trabajos realizados por M. Brady, ya que basta saber de las 7.000 placas que le proveyeron diecinueve fotógrafos, y el operador de Bate, Esteban García, estuvo acompañado por un grupo reducido.Este tipo de registros sufría, en esa época, ciertas limitaciones técnicas que permitían muy pocos desplazamientos, como las pesadas chapas del colodión y la cámara de tres pies.Aun así, durante el siglo XIX, la fotografía era considerada prueba irrefutable de la realidad por su analogón perfecto, apreciada por el positivismo en auge: objetividad y cientificidad.Si observamos las fotografías de Pozzo, los objetos y los sujetos fotografiados se pierden en la inmensidad que los rodea en esas fotos panorámicas.A excepción del General Roca y su Estado Mayor, que fueron registrados en un primer plano en un alto de la marcha, no se encuentran otras fotos con retratos en primer plano, mostrando un total vacío.