[9] Su candidatura a un título se reconoció mucho más tarde, y la recibió en 1921.
[14] Durante unas vacaciones de primavera, conocieron a Ernest Thompson Seton.
Seton influenció pronto en ella, alentando su preferencia por el estudio de las aves.
Estas colecciones son archivos de diversidad aviar y satisfacen las diversas necesidades de investigadores científicos, artistas y educadores; aun así, estuvo más interesada en estudiar pájaros vivos y su comportamiento en el campo.
[16] También en esa época, estaba de moda entre las mujeres llevar plumas en sus sombreros.
Junto con su familiares fue a visitar a su tío, Gustavus French Merriam, en su finca familiar del Condado de San Diego, California, llamada "Twin Oaks".
[26] Unos años más tarde viajó a Utah y Arizona en compañía de Oliva Thorne Miller.
[29]) A su regreso del oeste, Merriam estableció su residencia junto con su hermano C. Hart en Washington D. C., donde se dedicó a organizar las delegaciones locales del Women's National Science Club.
[33][34] Entre los visitantes que recibía en su casa figuraron Clarence Birdseye,[35] naturalista convertido en inventor, y la botánica Alice Eastwood.
[39] El libro siguió siendo una referencia estándar en ornitología regional durante al menos 50 años.
[33] Sin sacrificar la precisión técnica, el manual incluía descripciones vívidas de comportamientos como el anidamiento, la alimentación y la vocalización, información que no fue destacada en la literatura posterior.
[40] La pareja de naturalistas viajó mucho, y juntos fueron los responsables de animar a muchos jóvenes a estudiar historia natural.
[41] Durante las siguientes tres décadas, Florence y Vernon cubrieron gran parte del oeste americano.
Está enterrada en la antigua casa de Merriam, en Locust Grove, Nueva York.
[53] Fue la única mujer asociada hasta 1929, y la primera mujer receptora de su Medalla Brewster en 1931, otorgada por su obra Pájaros de Nuevo México.