Fijación de carbono

Los autótrofos incluyen a los fotoautótrofos, que sintetizan compuestos orgánicos utilizando la energía de la luz, y los litoautótrofos, que sintetizan compuestos orgánicos utilizando la energía producida por oxidaciones inorgánicas.

Los heterótrofos utilizan los compuestos orgánicos para producir energía y para construir las estructuras corporales.

[1]​ Se considera que la enzima fijadora de carbono RuBisCO es la proteína más abundante en la Tierra.

La fotosíntesis oxigénica se produce en las plantas, algas y cianobacterias (productores primarios) que poseen un pigmento biológico llamado clorofila, y utilizan el ciclo de Calvin para fijar el carbono autotróficamente.

Simultáneamente se produce energía química almacenada como ATP y moléculas reductoras (NADPH).

El ciclo de Calvin utiliza el carbono proveniente del dióxido de carbono para formar triosas fosfato (TP), tales como el gliceraldehido 3-fosfato (GAP) y la dihidroxiacetona fosfato (DHAP): Si se añaden a la ecuación los ATP y NADPH consumidos (procedentes de la fase luminosa), queda así: El Pi es un fosfato inorgánico, HOPO2−3 + 2 H+.

EL CO2 se activa reaccionando con una lisina en el centro activo, para formar un carbamato, y después se fija al mencionado azúcar al reaccionar con el grupo carbonilo del carbono 2 del azúcar para producir un grupo carboxilato (COO−).

La fotorrespiración consume energía, lo que supone una disminución del rendimiento de la fotosíntesis.

Estas adaptaciones conducen a lo que actualmente se conocen como plantas C4 y CAM.

Para capturar al carbono inorgánico más efectivamente, algunas plantas adoptaron la siguiente reacción anaplerótica: Catalizada por la PEP carboxilasa (PEPC), la cual carboxila al fosfoenolpiruvato (PEP) para formar oxalacetato (OAA), el cual es un ácido dicarboxílico C4, es decir, formado por 4 átomos de carbono.

Están mal adaptadas en evitar la fotorrespiración y la pérdida de agua en climas cálidos, pero son eficientes en otros ambientes.

Estas plantas no abren sus estomas durante el día porque transpirarían y se secarían, en cambio lo hacen de noche.

Aquí no hay una especialización anatómica de las hojas para la fijación del carbono, sino una separación temporal: durante la noche se fija el carbono como malato, y durante el día en el ciclo de Calvin.

Esta vía fue propuesta en 1965 por Ljungdahl y Wood cuando estaban estudiando a la bacteria Gram positiva productora de ácido acético Clostridium thermoaceticum (a veces llamada Moorella thermoacetica), razón por la cual también se la llama vía de Wood-Ljungdahl.

Ninguna de las enzimas que participan en el ciclo del 3-hidroxipropionato son especialmente sensibles al oxígeno.

[13]​[14]​ Se ha encontrado una variante de la vía del 3-hidroxipropionato en la arquea aeróbica termoacidófila extrema Metallosphaera sedula.

Microfotografía de Cianobacterias filamentosas fotosintéticas. Su aparición marcó el inicio de muchas plantas fotosintéticas, lo que cambió la atmósfera de la Tierra .
Gráfico que muestra las cantidades netas anuales de fijación de CO
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en organismos terrestres y acuáticos.