Hijo de Eusebio Sáenz Sánchez y Constanza Lacalle Cámara.
Sáenz defendió su postura diciendo que la Iglesia debe hablar en nombre de los pobres y necesitados, pero nunca debe llegar a estar implicada en activismo o política.
[4] Saénz Lacalle acompañó a monseñor Romero, el mismo día de su asesinato a una actividad formativa en la que se trató de la Guerra cristera (México) y del beato Miguel Agustín Pro Juárez.
Y posteriormente lo trasladó en coche al Hospital de la Divina Providencia, en cuya capilla sería asesinado horas después, mientras presidía la celebración eucarística.
[4] En 1996, recibió al papa Juan Pablo II, en su segunda visita a El Salvador.
[6][7] Como presidente de la Conferencia Episcopal, se manifestó en varias ocasiones contra la sobreexplotación minera del país, por los daños que provoca en las personas y en el medio ambiente.