Federico Smith

[1]​[2]​[3]​ Smith comienza sus estudios musicales en su país natal, y en 1950, viaja a México donde se radica durante los siguientes doce años.Esta participación refleja una tendencia ideológica que ya se había manifestado por su militancia en organizaciones comunistas en los Estados Unidos y sus estudios de la filosofía marxista.[4]​ En 1962, Smith viaja a La Habana, Cuba, invitado por el célebre actor y director mexicano Alfonso Arau con el propósito de colabrorar en el proyecto de reorganización del "Teatro Musical de La Habana", y allí permanecería hasta su fallecimiento en 1977.[4]​ Por su habilidad profesional y sus profundos conocimientos de matemáticas, arte, política y otras disciplinas académicas, Federico Smith fue considerado como un destacado intelectual con rasgos de genialidad en su época; pero lamentablemente su trayectoria profesional, que incluyó la composición musical, la pedagogía y la crítica musical, fue negativamente influenciada por su marcada adicción al alcohol y el tabaco, que muy probablemente lo condujeron a una muerte prematura.Él reconoció en Carlos Jiménez Mabarack a un valioso maestro comprometido con las jóvenes generaciones.