Federico I de Lorena

Fue el segundo hijo de Matías I y Judit, hija de Federico II, duque de Suabia.

Sucedió a su hermano, Simón II, quien le había dado ya el condado de Bitche en 1176 e hizo que lo reconocieran sobre la parte septentrional germanófona de Lorena por el Tratado de Ribemont de 1179.

Judit había querido que sucediera a su padre en todos los territorios, pero una guerra civil de tres años sólo le aseguró Bitche y una mitad.

Simón abdicó en 1205 y marchó a un monasterio, reconociendo al hijo de Federico, Federico como heredero.

Federico lo heredó todo, en cualquier caso, pero murió un año después y pasó al hijo que tuvo con Ludmila de Polonia (1150–1223), hija de Miecislao III el Viejo, duque de la Gran Polonia y alto duque de toda Polonia e Isabel de Árpád-Hungría, hija del rey Bela II de Hungría.