Fantastic Adventures

Los nueve primeros números se publicaron en formato bedsheet, pero en junio de 1940 la revista cambió a un tamaño pulp estándar.

John para el relato Jongor of Lost Land, de Robert Moore Williams.

Gran parte del material fue escrito por un pequeño grupo de escritores bajo seudónimos y nombres colectivos.

[1]​ Gernsback perdió el control de Amazing Stories en 1929; la revista se vendió a Teck Publications y en 1938 fue adquirida por Ziff-Davis.

El tamaño también se redujo a un formato pulp estándar, que era más barato.

Ese número incluía el relato Jongor of Lost Land, de Robert Moore Williams, que aparecía en la portada, obra del dibujante J. Allen St.

[9]​[10]​ Dejó a William Hamling asumir la responsabilidad de ambas revistas, y la calidad disminuyó.

[4]​ Según Ashley el primer número fue bastante pobre: el relato de portada fue «The Invisible Robinhood», de Eando Binder, y entre otros autores publicados estaban Harl Vincent, Ross Rocklynne y A. Hyatt Verrill.

[4]​[N 3]​ Entre su contenido se incluía un concurso, un perfil de autor y una tira, titulada «Ray Holmes, Detective Científico», donde el lector debía resolver un misterio basándose en las pistas ofrecidas, pero que un fracaso y desapareció después del primer número.

[8]​ El siguiente número incluía «The Scientists' Revolt», de Edgar Rice Burroughs, un nombre que garantizaba una mejora en las ventas.

A pesar de la debilidad del relato principal, el segundo número mostraba una marcada mejora respecto al primero, con relatos bien acogidos de Nelson S. Bond y John Russell Fearn (bajo el seudónimo «Thornton Ayre».

Los miembros principales del grupo fueron William P. McGivern, David Wright O'Brien, Don Wilcox, Chester S. Geier, Rog Phillips, Leroy Yerxa, Robert Moore Williams, Robert Bloch y Berkeley Livingston.

Ray Bradbury también vendió un relato a la revista, «Tomorrow and Tomorrow», que apareció en 1947 y fue su única aparición en Fantactis Adventures; Ashley lo considera «entre las mejores historias [Fantastic Adventures] publicadas en los años cuarenta».

Palmer fingió tomar la carta en serio, y publicó un llamamiento a los lectores para encontrar al científico.

[7]​ En abril de 1950 la primera historia de Mack Reynolds, «Isolationist», apareció en la revista, aunque Reynolds colaboró más habitualmente con Astounding Science Fiction que con las revistas de Ziff-Davis; «Isolationist» describe a unos serviciales visitantes extraterrestres que abandonan la Tierra a su suerte en una guerra atómica debido a la hostilidad del primer terrestre con el que se encuentran.

[7]​ El crítico John Clute considera que era inconsistente, «pero hubo algunos relatos fabulosos, no suficientes, pero algunos».

Entre los artistas que dibujaron habitualmente para la revista están Virgil Finlay, Henry Sharp, Rod Ruth y Malcolm Smith.

[8]​ En palabras de Palmer, «nuestra experiencia demuestra que las portadas venden revistas, simplemente porque atraen la atención».

[8]​ La revista se publicó inicialmente con periodicidad bimestral, pero cambió mensual en enero de 1940, aunque sólo durante seis números.

[6]​[8]​ A partir de 1941 se reimprimieron los ejemplares de Fantastic Adventures que no se habían vendido, uniendo tres números y con una nueva portada con el título Fantastic Adventures Quarterly.

Portada de Harold W. McCauley para el número de enero de 1941. Estas portadas, más sugestivas y conocidas como MacGirl , empezaron a aparecer a finales de 1940, remplazando a las más orientadas a la acción.
Portada de Robert Gibson Jones para Masters of Sleep , de L. Ron Hubbard , en el número de octubre de octubre de 1950.
Portada de Alexander Kohn para el número de marzo de 1949. Las naves espaciales como símbolo fálico eran habituales en las portadas de las revistas de ciencia ficción, pero en esta el papel lo desempeña un submarino. [ 16 ]