Este plato llevaba el nombre quichua de “uchucuta” que significa granos tiernos cocidos con ají y hierbas.
Durante la Colonia fue común que los españoles hicieran uso de símbolos indígenas para combinarlos con creencias católicas, logrando así un sincretismo cultural y religioso.
Con el paso del tiempo, esta preparación tomó el nombre de “fanesca” y se le otorgó un simbolismo cristiano.
En honor a los doce apóstoles, lleva 12 ingredientes, entre los cuales están granos típicamente de la Andinos como son: choclo, chochos, habas, arvejas, lenteja, maní y fréjol.
Para terminar este festín cuaresmal se acompaña el plato, sobre todo en Quito, con el tradicional dulce de higos con queso, arroz con leche o con las mistelas.