Familia nobiliaria de origen aragonés asentada en Villena (Alicante) cuyos miembros ocuparon cargos del gobierno local desde el siglo XIII como regidores perpetuos y jurados, destacando José Antonio López de Oliver, I conde de la Roche y en el siglo XIX la figura de Joaquín María López de Oliver, presidente del Consejo de Ministros de España y alcalde de Madrid.[1] Tuvieron su casa solar con sus armas en el desaparecido palacio de la Puerta de Almansa, con capillas y altares en la iglesia arciprestal de Santiago y en el monasterio de la Santísima Trinidad.[2] Ya entrado el siglo XVIII diferentes miembros ejercen como abogados de los Reales Consejos y una rama menor accede al título de Conde de la Roche.En el cambio de siglo Joaquín María López de Oliver llega a ostentar cargos de primer orden en el gobierno y administración siendo nombrado presidente de este hasta en dos ocasiones.En los siglos XIX y XX diferentes miembros siguieron desempeñando cargos de gobierno local y sirvieron también como diputados a cortes.