Félix del Granado

A esa edad fue nombrado secretario privado del presidente Mariano Baptista y posteriormente desempeñó funciones como profesor universitario, rector de la Universidad Mayor de San Simón, prefecto del departamento de Cochabamba, presidente del Centro Patriótico Boliviano, ministro de Instrucción Pública y Agricultura en el gobierno del presidente Bautista Saavedra y ministro de Educación en el gobierno del presidente Hernando Siles.

El año 1929 ocupó, por segunda vez, el cargo de prefecto del departamento, cargo que dimitió al haber sido elegido presidente del Honorable Consejo Municipal y primer alcalde de Cochabamba.

Tras su fallecimiento, el presidente Daniel Salamanca, visiblemente conmovido, suspendió toda actividad oficial por un día, en el cual declaró un duelo nacional.

Como otros intelectuales de su época, entre los que habría que recordar también al educador mexicano José Vasconcelos, resaltó los vínculos indisolubles de nuestra lengua y cultura compartidas.

Cuidadoso y riguroso en el uso del idioma, fue el más hábil y atento observador de la literatura española e hispanoamericana desde Bolivia del primer tercio del siglo XX, inaugurando una línea de trabajo, desde la convicción de que la literatura puede ahuyentar la injusticia y la fealdad y redimir al mundo, de la que su hijo Javier fue su más que entusiasmado deudor.

Félix Antonio del Granado Tardío