Simultáneamente se realizó el primer «Congreso Internacional de Electricistas» (en francés: Congrès international des Électriciens, que tuvo lugar en los salones del Palacio del Trocadero y fue la ocasión para presentar numerosas comunicaciones científicas y técnicas.
[1] La Exposición, después de la puesta a su disposición del palacio por el Estado, se organizó con fondos privados.
Los organizadores se aseguraron contra posibles pérdidas como en la Exposición Universal de 1867.
Los beneficios, por su parte, se destinarían a sufragar trabajos científicos de interés público.
Entre los objetos expuestos se encontraban: Léon Letrange presentó un método de producción de zinc electrolítico para reemplazar el proceso de destilación empleado hasta entonces.