Por sus propiedades antimicrobianas suele emplearse en la industria alimentaria como aditivo conservante, codificado como E-214 en el anexo de aditivos alimentarios del Codex Alimentarius.
Es un compuesto químico, de fórmula C6H5 CO2(CH3CH2), que se presenta en forma de polvo blanco.
Puede presentar algunos problemas toxicológicos y alergias en ciertos consumidores.
[cita requerida] Se acumula en el organismo.
Se suele emplear como conservante en los derivados cárnicos, en algunas conservas vegetales, en productos de gran contenido graso, en repostería, en la preparación de salsas, mariscos en conserva y caviar.