El compositor Armando (Fernando Fernández), reprocha a Beatriz (Gina Cabrera), su intérprete, que no sea más abnegada.
Camino al hotel, Armando atropella levemente a una joven llamada Sara (Rosa Carmina) y se enamoran.
La sorprende en un cabaret, pero Sara le promete no volver a cantar y se casan.
Un día Armando, desesperado porque no encuentra una intérprete, accede a que Sara cante y triunfa.
La cinta fue filmada en La Habana Vieja, cosa que nunca se había realizado.