[15] Hasta fines de la década del 30, sus propietarios fueron la mencionada PUC y el club Universidad Católica.
Según fuentes oficiales del club, es considerado el primero de sus cuatro estadios.
[5][8] A través de estos eventos se generaron recursos para el término del edificio que ocupaba la universidad.
[8] Desde 1928 hasta principios de los años 1930, el recinto deportivo fue compartido con la empresa Ratinoff y Cía,[24] mediante una concesión.
[2][11] En esa época, también existía el Teatro Reina Victoria, sede de espectáculos y jornadas pugilísticas.
[28] Aunque Becker no especifica el año en que el recinto fue usado como patio para los estudiantes,[28] pudiendo ser incluso años antes de su cierre, recién a fines de 1937 la Pontificia Universidad Católica dio a conocer públicamente que en ese sitio construiría el Gimnasio moderno y el Hospital Clínico,[4][3][29] el cual fue bendecido por el cardenal José María Caro en 1939 e implementado en 1940.
[9] En el reducto se desarrolló el Campeonato Latinoamericano de Boxeo Amateur 1929, edición donde el título fue para Chile.