Durante su etapa inicial, los terrenos de juego se localizaron en barrios porteños como Flores, La Paternal y Recoleta.
En 1906, Independiente alquiló su primer terreno en Avellaneda, ubicado en la localidad de Crucecita, sobre la calle Manuel Ocantos, donde permaneció hasta 1911.
[4] Posteriormente, el club construyó un estadio en la intersección de las calles Mitre y Lacarra, que fue su sede deportiva hasta 1928.
[6] Un mes después del anuncio, se presentó un proyecto de estadio y un vídeo ilustrativo el cual atrajo a los hinchas del club, pero debido a que el costo de construcción de este era muy costoso, se optó por un segundo proyecto más económico.
Sin embargo, con la venta de Oscar Ustari por $8 millones de euros al club, se optó por un tercer y definitivo proyecto, el cual se asemejaba al primero, presentado a mediados del año 2007.
El estadio debe su nombre a las siete Copas Libertadores de América ganadas por Independiente, y está inspirado en el clásico estilo inglés compuesto por 4 tribunas dobles y rodeadas en sus esquinas por estructuras denominadas "Gargantas del Diablo", las cuales albergan plateas preferenciales.
Luego se hizo saber que el pase del delantero Germán Denis al SSC Napoli por $8 millones de dólares se destinó también a las obras del estadio.
Entre los años 2013 y 2014, años en los que Independiente atravesó una fuerte crisis institucional y económica, y que derivó en el primer descenso del club a la Primera B Nacional (que se consumó con una derrota ante San Lorenzo en este estadio), las obras que faltaban completar en el estadio estaban paralizadas, llegando a estar considerado el estadio bajo un estado severo de abandono.
[14][15] En 2021 el estadio fue elegido para acoger la final del torneo de la Primera B 2020 entre Tristán Suárez y San Telmo.