Llegó a ser un importante nudo ferroviario al confluir en ella la radial Madrid-Barcelona y la transversal Ariza-Valladolid.
En 1985, la línea férrea que unía Ariza y Valladolid fue cerrada al tráfico de viajeros, y 10 años después se cerró por completo, estando desmantelada en la actualidad.
La importancia del lugar se ve reflejada en la gran cantidad de construcciones que rodean al mismo: almacenes, aguadas, torretas, depósitos o muelles están presentes.
En su mejor momento el recinto llegó a contar hasta 16 vías que se fueron retirando a medida que la estación perdía importancia.
Existen dos vías más terminadas en topera (3 y 5) y otras dos más igualmente en topera que rodean al edificio principal por detrás.