El diseño del escudo se componía de un triángulo equilátero; en su base aparecía una cordillera de cinco volcanes (en representación de cada uno de los estados que componía la federación) sobre un terreno que se figuraba bañado por las aguas del océano Pacífico y mar Caribe; en la parte superior, un arcoíris los cubría y bajo el mismo se hallaba el gorro frigio enastado en una lanza esparciendo luces.
El decreto que creó el escudo para las Provincias Unidas contenía la siguiente descripción:[2]
Este escudo se colocará en todos los puestos y oficinas públicas sustituyéndose a las que se han usado por disposiciones de los anteriores gobiernos.
Una vez que la República Federal se disolvió en 1839, cada uno de los países que la componían adoptó de manera unánime los colores blanco y azul de la bandera federada, con pequeños cambios respecto a sus vecinos, los cuales eran generalmente relativos al escudo nacional ubicado en el centro.
Algunas armas contienen referencias explícitas a la unión centroamericana, incluso en la ubicación del país en América Central.