El nombre proviene del griego σκάφη skáphe ‘barca, artesa, bañera’.
El procedimiento consistía en introducir a la víctima en un cajón de madera con cinco agujeros por los cuales sacaba la cabeza, las manos y los pies.
Al condenado se lo había alimentado ya con estos productos, en ocasiones en mal estado, para provocarle diarreas y atraer a muchos insectos, que empezaban a alimentarse de las heces, para luego ir ingresando en el ano de éste y, por consiguiente, a dejar sus huevos dentro de él, por lo que esa persona se convertía en comida para insectos y moría al cabo de unos días.
[2] Plutarco comenta en su obra Vidas Paralelas: También se ejecutaba este suplicio introduciendo a la víctima dentro del vientre de un caballo u otro animal corpulento y dejando fuera las cinco partes del cuerpo mencionadas.
[2] Esta práctica es considerada una invención de la literatura griega antigua y nunca ha sido demostrada en el Imperio persa (Dinastía aqueménida), la principal fuente es de Plutarco (Vida de Artaxerxes), donde él atribuye la historia a Ctesias, el cual es una fuente bastante dudosa.