Esta zona se degradó en gran medida con el paso del tiempo, por lo que se decidió construir una nueva ermita más grande y más cercana a la villa, en el lugar del templo actual.
Esta ermita se construyó en 1520, encargándose una nueva imagen gótica que sustituyó a la figura mozárabe, pero fue totalmente reconstruida entre los años 1738 y 1774, gracias a las donaciones de los ciudadanos.
Los últimos añadidos incluyen el atrio que se concluyó en el año 1800, la espadaña en 1900, la gran campana en 1917 y el nuevo pavimento en 1927.
[2] La joya de la ermita es el retablo, realizado por Alonso Gómez de Sandoval en 1770, y del que solamente se conserva el ático y la coronación debido a un expolio sufrido durante la guerra civil española.
También se perdió la imagen gótica de la Virgen, realizándose la actual por el escultor Juan Martínez Cerrillo en 1940.