Ambientada en 2010, la novela se centra en Heinrich Gimpel y un pequeño grupo de judíos que sobrevivieron al Holocausto haciéndose pasar por gentiles.
Los eventos ocurren en un contexto paralelo a los últimos días de la Unión Soviética, con personajes basados en Mijaíl Gorbachov, Borís Yeltsin y otros.
Los países ocupados tienen sus propios gobiernos pero soberanía limitada; los nazis interfieren en sus asuntos internos, especialmente en la aplicación de la ideología racial.
La nación está controlada por la Casa de Saboya (encabezada por el rey Humberto) y el Duce del Imperio italiano.
Rosenfeld afirmó que eso habría sido imposible en años anteriores, cuando la tendencia era mostrar a los nazis en historias alternativas como la "encarnación del mal".