Comenzó una carrera por los principales escenarios de Italia (particularmente en Roma y Génova), en la que tuvo gran éxito cantando los roles de Verdi.En 1858 debutó en Londres, donde cantaría habitualmente en todos los teatros de la ciudad, particularmente en Covent Garden, donde estuvo contratado entre 1863 y 1872.En París cantó desde 1862, donde destacó en Lucia di Lammermoor, Lucrezia Borgia, Rigoletto y Così fan tutte.[1] Al final de su carrera se inició en el canto wagneriano, cantando Lohengrin (en italiano) en diversos teatros de Inglaterra (aunque no en Londres[1]) y Tannhäuser en Moscú.[2] Se le admiró por la potencia penetrante de su voz y su gran musicalidad, además de su elegante apariencia en el escenario, aunque parece que era un actor mediocre.