La película fue dirigida por Lewis Gilbert y la protagoniza Jack Warner en una familia desempeñando el papel de policía.
También aparecieron Anthony Steel, Joy Shelton y Sid James como un dudoso promotor de boxeo.
Los tres donantes son muy distintos, un boxeador blanco, un marinero, y finalmente un asesino que ha estado en búsqueda de policía durante años.
La donación del boxeador fue simple, solo teniendo que evitar a su mánager.
Él debe elegir entre donar su última pinta y morir en la escena por la pérdida de sangre, o negarse a donar para recibir tratamiento en el hospital pero sabiendo que seguramente sea juzgado culpable del asesinato en un juicio y sentenciado a muerte.