Este incidente hace que Elena comience a reflexionar acerca de su responsabilidad como madre y termina asumiéndola, pero ahora es Raquel quien le pide a su prima que le entregue al niño para criarlo, tras confesarle que por culpa de su esterilidad se divorció de su esposo.
Esta película significó el debut en el cine mexicano de la actriz peruana Saby Kamalich quien, para la época, ya se había hecho famosa en toda Hispanoamérica por la telenovela Simplemente María.
Es de hacer notar que en esta película aparece en una escena (a modo de cameo) una joven y entonces poco conocida Olga Breeskin conversando unas breves palabras con Hilda Aguirre en un restaurante.
Años más tarde Breeskin se convertiría en la vedette número uno de México pero, tras una serie de incidentes que terminarían por dejarla arruinada económicamente y al borde de la muerte, en 2008 se convirtió al Cristianismo y abandonó el mundo del espectáculo.
En la actualidad, aparte de su labor en la Iglesia, Breeskin solamente se presenta como violinista.