Elena Martín Vivaldi

[1]​ Nació en 1907 en Granada, ciudad en la que vivió y trabajó casi toda su vida.

Trabajó como bibliotecaria en Osuna, ciudad donde vivió sola pese a no estar muy bien visto en aquella época.

Francisco Gil Cravioto cuenta cómo conoció a Elena en el café Granada[7]​

[12]​ Publicó Los árboles presento (1977), Noctunos (1981), Y era su nombre mar (1977), Desengaños de amor fingido (1986), Jardín que fue (1977), Tiempo a la orilla (Obra reunida, 1942-1984), Jardín que fue (1985), Con solo esta palabra (1990), La realidad soñada (1990), Poemas (1994) y Las ventanas iluminadas (1997).

Además de la nota bibliográfica, las seis lecturas de poemas de Elena Martín Vivaldi que hacen Rosaura Álvarez, Antonio Carvajal, Rafael Guillén, José Gutiérrez y Rafael Juárez, envueltas en este Unos labios dicen,[12]​son para leer poesía en voz alta y dar a entender a los jóvenes que: [12]​ Elena Martín Vivaldi fue poetisa.

Es difícil, dejó escrito, decir qué se escribe y cómo; sus técnicas, motivos, temas, etc.

La naturaleza, árboles, flores y pájaros, sobre todo, supone una constante a lo largo de su obra, con el paisaje como reflejo del estado anímico o moral.

Puede, por tanto, considerarse el engarce entre estos y la generación del 27.Para Gallego Morell

En 1945, publica, en la colección granadina «Vientos del Sur», su primer poemario Escalera de Luna.

Cuántos agostos largos, y qué intensos te han cubierto, doliente, de amarillos.

En Durante este tiempo, se encuentra el poema dedicado a Juan de Loxa: “Lluvia con variaciones”.

Francisco Acuyo publica [1] las cartas originales de la correspondencia que mantuvieron Elena Martín Vivaldi y Jorge Guillén.

Ay, perdóname, Celia; tú no sabes cómo duele la vida, cómo a veces el verso se nos quiebra en un tibio sollozo Elena Martín Vivaldi pertenece a ese grupo de escritores que expresamente dice qué hay detrás de su obra.

Antonio Sánchez Trigueros entra en el laboratorio de Martín para estudiar las dos versiones del mismo poema que Martín escribió en un "diálogo con el autor francés" Ronsard, en sus «Sonetos para Elena», evocaré los días en que plena de una ilusión mi alma se colmara.

(...) Irá la noche entrando en mi aposento, roja la llama danzará en la sombra, dando a mis ojos una luz mentida, y escucharé una voz que con tu acento, urgiéndome, dirá, mientras me nombra: Forma parte del proyecto Mujeres Investigadoras en los Archivos Estatales (1900-1970) del Ministerio de Cultura.

Elena Martín Vivaldi, “Nacía cada vez que se anunciaba la primavera o como flor brotaba de su alma un poema”. Emilio de Santiago [ 2 ]
Lluvia con variaciones. Elena Martín Vivaldi