Tras la derrota del PSOE en las elecciones generales de 1996, trabajó dos años en el Instituto Gallego de Medicina Técnica y se incorporó a la empresa Rodman Polyships como Directora Financiera Administrativa.
[3] Según Ecologistas en Acción, dio «un giro antiecológico» a este ministerio, paralizando de facto la aprobación o aplicación de importantes aunque insuficientes medidas para la protección medioambiental, desmontando equipos técnicos y despreciando a la totalidad del movimiento ecologista.
Se dieron pasos para orientarse en esa dirección hasta tal punto que la política ambiental del Gobierno rebasa las competencias mismas del Ministerio para «trascender» a otros departamentos.
Poco después, abandonó la política y se incorporó a su antigua empresa como adjunta a la Presidencia del Grupo Rodman.
Esa empresa recibió contratos multimillonarios de Rodríguez Zapatero aumentando el escándalo.