[6] El año 301 a. C., Elatea consiguió rechazar el asedio de un ejército macedonio dirigido por Casandro.En recompensa, Roma concedió la libertad y la inmunidad de tributos a la ciudad.[7] Pausanias, cuando visitó la ciudad, destacó el ágora, una imagen en relieve en una estela de Élato, —de la que desconocía si era solo conmemorativa o indicaba que se creía que estaba allí enterrado—, un templo de Asclepio con una imagen realizada por los atenienses Timocles y Timárquides, un teatro y una estatua en bronce de Atenea.[8] Se conservan restos de este santuario, fechado en la primera mitad del siglo V a. C., en una colina llamada actualmente Kastro tou Lasou, donde además se hallaron puntas de lanza y otras armas.); otras ciudades son Zeli (673), Panagítsa (266), Lefkochóri (123), Sfáka (93), y Katályma (11).