Si bien esa no fue la primera novela del autor, sí fue la primera en aparecer publicada bajo su nombre, y la que lo hizo conocido para el gran público como un escritor de ciencia ficción.
Bill Masen, un biólogo británico, el narrador y protagonista, despierta en un hospital con los ojos cubiertos de vendas debido a sus cuidados médicos.
Siéndole imposible ver, lanza gritos al azar para saber que pasa, pero en respuesta solo le llegan lamentos lejanos.
Masen se encuentra en su habitación, meditabundo y asustado, indefenso al no poder ver.
Bill Masen se viste y sale de su habitación, encontrándose con un hospital vacío.
Bill sigue avanzando, encontrando pacientes ciegos e indefensos, por los que nada puede hacer.
Una vez en la casa, Bill advierte una figura familiar y peligrosa en el patio: un trífido.
Por último, los trífidos, al no tener vista y estar acostumbrados a ello, están en mejor posición ante cualquier hombre ciego.
Bill se dirige a Sussex, el lugar que había mencionado Josella.
De ahí en adelante pasan los años, en los que Josella y Bill tienen un hijo, David, a quien crían junto con Susan.
Un día un helicóptero aparece en la finca donde viven y se prende una gran fogata para llamar su atención.
Días después un hombre llamado Torrence aparece junto con otras personas que fueron atraídas por la fogata.
Bill los engaña diciéndoles que acepta, pero cuando los hombres duermen, este avería su camión y escapa con los integrantes de la casa.