Esta novela es inusual por sus consideraciones prácticas sobre el vampirismo, como la dificultad de obtener víctimas y ocultar los asesinatos.
Miriam descubre que algunos rasgos vampíricos, como la juventud prolongada, pueden transmitirse temporalmente a los humanos mediante una transfusión de sangre.
Miriam se sorprende por la brevedad del tiempo que John ha durado (sólo unos doscientos años), pero en secreto ha estado observando el trabajo de la Dra.
Pero John se vuelve demasiado incontrolable y Miriam pronto decide buscar una nueva compañera... Sarah.
Esta adaptación fue mal recibida por la crítica pero se ha convertido en una película de culto entre los aficionados al vampirismo.