Sus orígenes se remontan a finales del siglo xix, cuando el portugués Luis da Gama formó una ganadería con reses de Joaquín Murube.
[3] Tras el fallecimiento de Antonio Pérez-Tabernero, su hija mayor Amelia Pérez-Tabernero Montalvo hereda una parte y se la añade a una ganadería que había adquirido de Isabel Rosa González Martín, modificando también el hierro.
En el año 1975, una vaca de esta ganadería le causó la muerte a Antonio Bienvenida cuando este la tentaba en la finca;[4][5][6] afectada por esto, Amelia vendió la ganadería a Domingo Hernández Martín, propietario desde 1980 de Garcigrande.
Atienden en sus características zootécnicas a las que recoge como propias de este encaste el Ministerio del Interior:[16] Debutó por primera vez en los Sanfermines de Pamplona en un encierro rápido que duró 2 minutos y 45 segundos, dejando un herido por asta de toro y otros seis restantes por diversas contusiones.
[24][25][26] Fueron estoqueados esa tarde por Sebastián Castella y José María Manzanares.