[7] También poseía caballerizas que aprovisionaban los animales para las cabalgatas y cacerias, entre ellas la del zorro, al estilo británico.[7] Era autónomo, al modo de las estancias argentinas; contaba con usina eléctrica propia, calefacción central, talleres, quinta y corrales para el abastecimiento y procesado de todos los alimentos que se consumían.[2] En enero de 1898, apenas con la mitad del hotel construido, comenzaron a llegar los primeros pasajeros.[8] En busca de mayores ingresos, lo promociona Europa, incrementando la clientela y comenzando a obtener ganancias.[2] En 1947, tras la llegada de Perón al gobierno, el hotel fue devuelto a sus dueños quienes lo pusieron en venta casi inmediatamente.Fue comprado por la firma Tres K, cuya propiedad se atribuía a Juan Duarte, cuñado de Perón.Ellos tenían permitido entrar en los cuartos privados del Führer todo el tiempo, sin ser anunciados previamente.[8] Otros documentos hallados muestran la correspondencia fluida que existía entre Hitler y los dueños del Eden.